Programa en Castellano

Publicado el 22/12/2019388 palabras · 2 minutos

Programa en castellano, en serio te lo digo. En castellano, en portugués, en italiano, en chino... o en inglés. En tu lengua. Deja de usar otra que no sea la tuya siempre que puedas y comienza a pensar y a programar de una forma natural para tí.

Utiliza tu lengua materna, da igual cuál sea. Úsala para organizar tus ideas, darles forma y finalmente implementarlas. El lenguaje con el que expresamos nuestras ideas tiene una gran influencia en nuestros procesos de pensamiento [1]. Los límites de mi lenguaje son los límites de mi mundo [2]. Es muy difícil, seguramente imposible, razonar de forma precisa pensando en una lengua que no es la tuya. Imagínate pensando en dos. O en tres si incluyes la terminología del cliente. Entiende más y mejor usando términos que tengan significado para tí.

Piensa en la audiencia de tu código. ¿Quién tendrá que entender el nombre de las variables, de los métodos, de las clases?, ¿quién tendrá que seguir el flujo?, ¿quién tendrá que comprender cómo se relacionan unas cosas con otras?. Nunca será el ordenador. Los programas deberían ser escritos para que la gente los lea y, en menor medida, para que los ordenadores los ejecuten [3]. Si el único autor del código eres tú, ¿por qué no hablarte en una lengua que entiendes perfectamente?.

Acostúmbrate a ver el código fuente como un medio de comunicación por el que dos o más personas van a intercambiar tanto ideas como una forma de pensar. Utiliza un enfoque comunicativo: haz que el mensaje sea más fácil de enviar y también de recibir. A más sencillo un mensaje, más receptores podrán entenderlo. La mejor palabra que puedes usar es aquella que no tienes que buscar en un diccionario de sinónimos. No hay excepciones en esta regla [4]. El mejor nombre es aquel cuyo significado encaja perfectamente y no requiere explicación.

Abandona la idea de usar un idioma que no sea el tuyo sin cuestionarte si realmente te ayuda. Acabemos con esta dictadura autoimpuesta que no nos lleva a nada. Millones de líneas de código no pueden estar equivocadas pero lo están: comenzando por nombres que no son precisos y terminando por una documentación que no está escrita porque no se domina el idioma con la que se quiere escribir.

Dejemos atrás el Traje Nuevo del Emperador [5]. Si alguien duda de tu código únicamente por estar escrito en castellano... peor para él.